Demonio de Fundición

Para el jefe opcional del Paso de hierro, véase Demonio de Fundición (Paso de hierro).

El Demonio de Fundición es un jefe opcional de Dark Souls II.

Descripción[]

El Demonio de Fundición es similar al Golem de hierro de Dark Souls, ya que se trata de un autómata de hierro al que se le da vida a través de algún medio. Su cuerpo está hecho de hierro negro a excepción de una parte de su pecho, que es hueca y expone un núcleo de llamas.

Localización[]

El Demonio de Fundición se encuentra en el lado derecho del área abierta en el Torreón de hierro, más allá de las primeras dos habitaciones con Caballeros Alonne.

Lore[]

El Demonio de Fundición es una masa de hierro a la que se le ha dado vida.^[1] Cuando el Viejo Rey de Hierro adquirió la facultad de otorgar vida a montones de hierro mediante el cetro de hierro incandescente, moldeó una gran variedad de autómatas metálicos. Los Demonios de Fundición fueron probablemente creados para ser simples marionetas del rey.

Al rey le arrebató la vida una de estas masas de hierro dotadas de alma. Esta criatura incineró al rey al instante y el castillo fue engullido por un mar de llamas.^[2]

Invocaciones[]

Lucatiel de Mirrah puede ser invocada para este combate. Su señal de invocación se encuentra en dirección contraria a la puerta de niebla.

Estrategia[]

Se recomienda alta resistencia al fuego para esta pelea, ya que el Demonio de Fundición intensificará el fuego en su torso dañando de forma continua al jugador si se encuentra demasiado cerca. Después de recibir una cantidad de daño considerable, clavará su espada en su cuerpo en llamas (esto no afecta a la salud del Demonio de Fundición) e imbuirá su espada con llamas, haciendo que sus ataques produzcan daño de fuego (Nota: La reducción de su salud al 50% lo suficientemente rápido hará que se vaya intensificando el fuego e impregne de fuego directamente su espada, reduciendo efectivamente su capacidad de daño).
Usar un personaje a distancia reducirá en gran medida la dificultad de esta pelea ya que la mayoría de sus ataques pueden ser fácilmente esquivados y el jefe en sí no es demasiado rápido, lo que permite al jugador infligir una gran cantidad de daño.
Invocar a Lucatiel y dejar que "tanquee" al jefe es una gran estrategia para los personajes, tanto a distancia y cuerpo a cuerpo, pero ella no durará mucho ya que su escudo no tiene 100% de reducción a ataques físicos y no se defiende muy a menudo. Sin embargo, es probable que sobreviva hasta que el jefe clava su espada en su torso.
Un Escudo grande Gyrm permitirá al jugador negar el daño de fuego una vez que el Demonio de Fundición encienda su espada, disminuyendo drásticamente la dificultad del combate.
Usar una Gema de vida mitigará el daño infligido por estar cerca del Demonio de Fundición cuando fortalece la llama en su torso.
El Demonio de Fundición puede ejecutar un dañino ataque de área de efecto unos pocos segundos después de aterrizar de su ataque de salto, lo cual puede sorprender al jugador con la guardia baja.

Si el jugador utiliza algún tipo de magia la lucha será más fácil, ya que no necesita hacer frente a los daños infligidos por el fuego al permanecer cerca del Demonio de Fundición. Si el jugador lanza milagros ofensivos al Demonio de Fundición, se lo debe lanzar una sola vez debido a que el tiempo de lanzamiento del milagro es retardado; si el jugador intenta lanzar otro, el Demonio de Fundición probablemente conecte un golpe. Dependiendo de los hechizos que el jugador está utilizando se pueden conectar uno (Vórtice de alma) o dos golpes (Gran flecha del alma pesada) en función del tiempo de lanzamiento del hechizo.

Cuando el Demonio de Fundición está utilizando su torso para incrementar su poder, el jugador debe evitar castear cualquier tipo de magia, ya que su defensa aumenta cuando lo hace, de todas formas el jugador puede atacarle con Niebla oscura y Neblina tóxica debido a que el Demonio de Fundición no es resistente al veneno.

El jugador debe evitar bloquear los ataques del Demonio de Fundición si no posee una alta resistencia al fuego, especialmente cuando el jefe impregna con fuego su arma.

Estrategia alterna[]

Con esta estrategia el daño causado por este jefe será mínimo. Los requisitos son:

Tener equipo con alta resistencia al fuego (el Conjunto de caballero Alonne mejorado a +4 es muy eficaz).
Se debe estar mojado. Hay jarrones de agua en algunas partes de la zona, así como un mecanismo de Pharros que libera agua curativa cerca de la niebla del jefe, poco después de recoger el Ascua mortecina (Hueso de dragón petrificado en SotFS).
Se debe tener equipado el Anillo de cuarzo de llama (preferiblemente la versión +1 que está en el pozo de las salamandras en el Bosque de los Gigantes caídos).
Se debe consumir una Bráctea pequeña naranja antes de atravesar la niebla.
Se debe tener equipada la piromancia Sudor relámpago, ya que reduce el daño por fuego. Tener equipadas las Esposas penales aumenta el efecto de las piromancias por lo que aumenta la resistencia, aunque no es obligatorio equiparlas.
La Llama de piromancia debe estar bien mejorada.

Una vez cumplidos estos requisitos el combate será sencillo. Incluso será posible derrotar a este jefe con ataques cuerpo a cuerpo. Las armas imbuidas con veneno son muy útiles, ya que con darle unos cuantos golpes el demonio quedará envenenado y solo habrá que alejarse hasta que pase el efecto. Si esta táctica es usada junto a las anteriores el combate resulta extremadamente fácil.

Nota: Esta táctica puede ser usada para atravesar los caminos de lava por los que hay que pasar para recoger ciertos objetos.

Notas[]

Quemar un Ascua de la adversidad en la hoguera Puente del umbral lo hará reaparecer.
Tras derrotar a este jefe, Maughlin el Armero pondrá a la venta el Conjunto de Demonio de Fundición.
Después de derrotar al demonio, El Perseguidor aparecerá en la arena.